Ven, espíritu de Dios
Espíritu de sabiduría,
ayúdanos a construir la paz,
sé la fuerza para caminar cada día,
consuélanos en los días malos,
sé el maestro que nos enseñe la bondad,
pon en nuestro interior una semilla de alegría.
Tú, que traes la risa, el buen humor y los juegos compartidos.