Aquí estoy, cuenta conmigo

Gracias Jesús por estar en mí.
Y recordarme que me quieres.
Gracias por querer que sea tu testigo.
Y les hable a otros de ti.
Cuando no sepa qué decir,
cuando esté triste o cansado,
cuando viva ilusionado y contento,
siempre me acordaré de ti
y te diré: «Aquí estoy, cuenta conmigo».