No temas.
No temas. Yo estaré contigo.
Yo pondré mis palabras en tu boca en ese asunto tan delicado que te preocupa.
No temas. Yo estaré contigo.
Yo te daré valor para esa decisión tan importante que tienes que tomar.
No temas. Yo estaré contigo.
Yo te levantaré cuando caigas. Ve, aunque tropieces, aunque te llenes de barro.
No temas. Yo estaré contigo.
Sé signo de mi esperanza en medio del mundo del dolor y la tristeza. Anuncia que el Reino de Dios ya está entre nosotros.
No temas. Yo estaré contigo. No te abandonaré.