Llama de amor viva
¡Oh, llama de amor viva,
que tiernamente hieres
de mi alma en el más profundo centro!
Pues ya no eres esquiva,
acaba ya, si quieres;
rompe la tela de este dulce encuentro.
¡Oh, cauterio suave! ¡Oh, regalada llaga!
¡Oh, mano blanda! ¡Oh, toque delicado!
Que a vida eterna sabe y toda deuda paga;
matando, muerte en vida la has trocado.
¡Oh, lámparas de fuego,
en cuyos resplandores
las profundas cavernas del sentido,
que estaba oscuro y ciego,
con extraños primores
calor y luz dan junto a su querido!
¡Cuán manso y amoroso
recuerdas en mi seno
donde secretamente solo moras,
y en tu aspirar sabroso
de bien y gloria lleno
cuán delicadamente me enamoras!
(san Juan de la Cruz)
que tiernamente hieres
de mi alma en el más profundo centro!
Pues ya no eres esquiva,
acaba ya, si quieres;
rompe la tela de este dulce encuentro.
¡Oh, cauterio suave! ¡Oh, regalada llaga!
¡Oh, mano blanda! ¡Oh, toque delicado!
Que a vida eterna sabe y toda deuda paga;
matando, muerte en vida la has trocado.
¡Oh, lámparas de fuego,
en cuyos resplandores
las profundas cavernas del sentido,
que estaba oscuro y ciego,
con extraños primores
calor y luz dan junto a su querido!
¡Cuán manso y amoroso
recuerdas en mi seno
donde secretamente solo moras,
y en tu aspirar sabroso
de bien y gloria lleno
cuán delicadamente me enamoras!
(san Juan de la Cruz)