Alégrate

Alégrate…
Porque Dios nos desborda en el encuentro, en el canto; como río en crecida que posibilita la vida en las áridas tierras a las que el agua aún no llega.
Alégrate…
Porque Dios visita a su pueblo y viene con deseo de quedarse para siempre.
Alégrate…
Porque Dios cuenta contigo y conmigo para llevar adelante su plan, más allá de nuestras cegueras, parálisis y miedos.
Alégrate…
Porque Dios, en medio de la brega, nos da su pan, su agua, y derrocha toda clase de bendiciones.
Alégrate…
Porque nuestro Dios nos declara su amor intensamente y nos invita a dejarnos atraer y seducir por Él…
…y todo… por pura Gracia.

(Ain Karem)