Jn 6, 60-69
¿Os acordáis de las últimas semanas? Todo este tiempo que Jesús ha estado explicando a los discípulos esas cosas tan extrañas sobre el pan y todo eso… Muchos de los que le escuchaban estaban enfadados porque no lo entendían, así que decidieron marcharse. Ya no querían ser sus amigos.
Entonces Jesús se fue a hablar con los amigos más cercanos: Pedro, Santiago, Juan, los que siempre iban con él. Y les preguntó, un poco triste: «¿También vosotros queréis marcharos?» Entonces Pedro se rio, le puso un brazo sobre los hombros y le dijo: «Pero hombre, ¿cómo dices eso? ¿A dónde vamos a ir? Nosotros nos fiamos de ti. Tus palabras nos ayudan. Y aunque no siempre lo entendamos, sabemos que tú hablas de Dios». Jesús sonrió al escucharlo, y se sintió muy contento de tener amigos como ellos.
Eres quien más me conoce
Eres quien más me conoce
quien no se separa de mí ni un solo minuto,
quien entiende lo que necesito,
quien sabe lo que me gusta y lo que me molesta…
Quien me espera siempre,
quien siempre me escucha,
quien me quiere como si yo fuera único.