Mc 13, 24-32
A veces Jesús hablaba del futuro, pero lo hacía como si hablase en clave. Un día les quería contar que al final de los tiempos todos nos encontraremos con Dios, y que antes habrá señales para que nos demos cuenta. Pero como no lo entendían, puso una imagen. Les dijo: «es como la higuera. (La higuera es el árbol que da higos). Cuando las ramas se ponen tiernas y aparecen brotes pequeñitos, sabéis que el verano está ya cerca. Pues es lo mismo. Cuando veáis algunas señales en el cielo, sabed que Dios está cerca». Y les decía también: «El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán». Los amigos de Jesús se miraban un poco confundidos, porque no entendían de qué les estaba hablando.
Quiero estar a tu lado
Señor Jesús, quiero estar a tu lado,
en los días buenos,
en los días malos.
Cuando soy pequeño,
cuando me haga mayor.
Si estoy rodeado de gente,
si estoy yo solo.