Había tanta gente siguiendo a Jesús, que un día que iba a enseñarles tuvo que subirse a una montaña para que le vieran desde lo alto. Los que iban con Jesús eran los pobres, los enfermos, los más débiles de la sociedad. Y él se puso a hablar. Y les decía: «Felices los pobres de espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos. Felices también los que ahora lloran, porque serán consolados. Felices los que sufren, porque heredarán la tierra. Felices los que tienen hambre y sed de justicia, porque comerán hasta hartarse. Felices los que perdonan, porque serán perdonados. Felices los que tienen una mirada limpia, porque verán a Dios. Felices los que trabajan por la paz, porque se llamarán hijos de Dios. Felices los perseguidos por trabajar por lo que es justo, porque suyo es el reino de los cielos. Y si os critican por venir conmigo, felices vosotros también. Estad alegres y contentos, porque vuestra recompensa será grande en el cielo». La gente, cuando escuchaba estas palabras, se sentía de verdad feliz.
Dame Jesús un corazón grande como el mundo.
Lleno de palabras que acaricien el corazón.
Lleno de miradas que digan: ‘Aquí estoy’.
Lleno de gestos que consuelen al amigo triste.
Dame Jesús, la alegría de todos los santos,
Y feliz seré Jesús, si hago felices a los demás.
Contigo el día es más feliz.
Contigo la vida es siempre mejor.
Y con mis ideas, mis besos, mi trabajo y mis juegos…
te ayudaré hoy a que el mundo sonría.
Amén.
¡Qué afortunados sois los necesitados hoy,
pues vuestro será el Reino de Dios!
Bienaventurados sois si lloráis y sufrís hoy
pues, de Dios, tendréis consolación.
¡Qué felices sois los mansos,
pues la tierra heredaréis!
Los que deseáis justicia
ese hambre saciaréis.
Muy feliz será aquel que misericordia dé,
porque la misericordia también llegará hasta él.
Muy afortunados sois los de limpio corazón
porque un día a Dios veréis cara a cara, con Él.
Muy afortunados sois los pacificadores hoy,
pues se os llamará 'hijos de Dios'
Y muy bienaventurados sois si sufrís persecución por ser justos
¡Reinaréis con Dios!
Y feliz el que soporta la mentira, burla y odio perseguido por Mi causa,
pues gran premio tendrá.
Yo soy Luz que os va a alumbrar, soy Pastor que os va a cuidar.
Eres Pan que nos da vida, agua viva, libertad.
Acercaos hoy a mí todos los que estáis cansados y cargados,
pues Yo os haré descansar.
Yo soy el Camino, la Verdad, la Vida soy.
Nadie llegará hasta Dios si no es por ti.
Yo venzo a la muerte: Yo soy la Resurrección.
El que cree en ti, aunque muera, vivirá.