En aquel tiempo, Jesús decía: «¿A qué es semejante el Reino de Dios? ¿A qué lo compararé? Es semejante a un grano de mostaza, que tomó un hombre y lo puso en su jardín, y creció hasta hacerse árbol, y las aves del cielo anidaron en sus ramas». Dijo también: «¿A qué compararé el Reino de Dios? Es semejante a la levadura que tomó una mujer y la metió en tres medidas de harina, hasta que fermentó todo».
«Laudate Omnes Gentes» © Autorización de Atheliers et Press de Taizé
«3 hours of beautiful instrumental music» © Compartido en Youtube por Peder B. Helland
Es en lo pequeño
donde se gestan las grandes historias.
En la desnudez vulnerable,
en el hambre de evangelio,
en la caricia tímida,
en la palabra discreta,
en la revolución silenciosa.
Así es tu amor.
Un grano de mostaza
que ya anuncia un árbol.
Levadura invisible
que entreteje,
en lo profundo,
una justicia inmortal
que ha de alzarse
al calor del fuego
que es tu anuncio.
Es en lo pequeño, sí,
donde cabe tu verdad.
Magnificat recitado
por una muchacha pobre.
Letras en la arena
que sólo el pecador entiende.
Perfume guardado
para la fiesta especial.
Amistad de un leproso
que regresa a dar las gracias.
Campesino que ayuda
a cargar la cruz.
Cabellos que secan
lágrimas de agotamiento y culpa.
Humano temor que pide:
«Velad conmigo».
Así, en lo pequeño,
explota el Reino.
Y otra vez sin enterarnos.
(José María R. Olaizola)