Jesús, para aprender de ti, quiero comer de tu pan. Para ser fuerte como tú, quiero comer de tu pan. Para amar a tu manera, quiero comer de tu pan. Ese pan que es abundante, quiero comer de tu pan. Ese pan que es para todos, quiero comer de tu pan. Ese pan que se comparte, quiero comer de tu pan. Ese pan que nos transforma, quiero comer de tu pan.
Para celebrar el Día de la Paz y la No Violencia. Vengo a pedirte por la paz en el mundo, Señor… vengo a pedirte el fin de la guerra, del egoísmo, de la soledad, de la falta de solidaridad… de todas aquellas cosas que no dejan a este tu mundo vivir en paz.
Con esta oración, ofrecemos material para poder hacer un examen del día al modo ignaciano. Para ello se invita a los niños a comenzar con un poco de relajación, poniéndose en presencia de Dios, y después se va haciendo un recorrido con varios pasos.